Quien tome fotos o video al votar en Ecuador se expone a fuertes multas. La medida ha desatado una lluvia de críticas
Por Ana María Cañizares, CNN en Español
Usar teléfonos celulares o dispositivos electrónicos al momento de ejercer el voto en las elecciones presidenciales del 13 de abril en Ecuador puede salir muy caro para quienes lo hagan. El Consejo Nacional Electoral (CNE) aprobó este jueves una resolución que establece multas de entre US$ 9.870 y US$ 32.900 si el votante toma fotos o graba su sufragio, medida que ya despertó polémica.
El CNE argumentó que esta medida responde a un pedido del Bloque de Seguridad, conformado por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, para evitar extorsiones o amenazas al momento en que los ciudadanos ejerzan su derecho. El propio presidente Daniel Noboa lo había pedido públicamente tras la primera vuelta electoral, en la que los apretados resultados impidieron su proyección de triunfo en una sola jornada.
“Con esta medida, el CNE busca evitar coerciones provenientes no solo desde el ámbito delincuencial, sino también desde el laboral o cualquier otro tipo de relación de poder que se pueda ejercer sobre otras personas, garantizando así un voto libre y secreto”, dijo este viernes la presidenta del CNE, Diana Atamaint, en rueda de prensa.
Atamaint defendió la medida y enfatizó que la restricción corre desde el momento en que un ciudadano se presenta en la junta receptora del voto, entrega su documento de identificación, acude al biombo, ejerce el sufragio, deposita la papeleta y regresa a la mesa para que le devuelvan su documento. Precisó que no está prohibido acudir al recinto electoral con el celular, pero no se podrá utilizar durante el circuito del sufragio.
Atamaint insistió en que se sancionará como una infracción electoral “muy grave” que, de acuerdo con el Código de la Democracia, puede incluir multas elevadas.
“Se aplicará bajo los mismos procedimientos cuando se tiene que sancionar una infracción electoral. El procedimiento de cómo se tomará nota si un ciudadano incumple con la disposición lo estamos trabajando con el área técnica”, agregó.
Esta prohibición se extiende también a los miembros de las juntas receptoras del voto a partir de las 5:00 p.m., cuando termina la jornada de votación y empieza el escrutinio. Solo uno de los miembros de la mesa receptora del voto podrá, a partir de esa hora, usar un dispositivo con el fin de realizar las operaciones matemáticas necesarias para llenar las actas de escrutinio, aclaró el CNE.
El organismo electoral también precisó que la resolución no prohíbe que los delegados de los partidos y movimientos políticos, periodistas y observadores electorales puedan grabar o fotografiar la jornada de votación y el proceso de escrutinio.
En cuanto fue publicada la resolución del CNE, las críticas desde los movimientos políticos, juristas, ciudadanos y diferentes sectores sociales no se hicieron esperar.
El constitucionalista André Benavides indicó en su cuenta de la red X que la prohibición del CNE “no es justa, válida ni eficaz”. Llamó la atención de que la multa por tomar una foto del voto sea más elevada que portar un arma dentro de un recinto electoral (US$ 235).
El académico y experto en democracia y gobierno Esteban Ron señaló que la resolución del CNE es inconstitucional, ilegal y vacía, sin efectos jurídicos reales.
“Hay varios mecanismos constitucionales y electorales que se podrían activar que no solo declararán vulneración de derechos, medidas de reparación e inclusive sanciones a los consejeros (del CNE)”, añadió.
El CNE respondió a CNN que hasta el momento no se han presentado impugnaciones a la resolución y el Movimiento Revolución Ciudadana señaló que hará consultas internas sobre el tema.
El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, indicó que es una “grave e inconstitucional decisión”.
“Atenta contra la transparencia y la democracia. La falta de registro, evidencia y confianza golpeará la legitimidad de quien gane”, señaló en su cuenta de X.
Mientras que la asambleísta y jefa de bloque del movimiento oficialista ADN, Valentina Centeno, aplaudió la resolución porque considera que está precautelando la integridad de los votantes.
“Lo absurdo es oponerse a una medida que protege a los ecuatorianos de la intimidación, la extorsión y la compra de votos. Quienes critican la prohibición de uso de celulares en las urnas no defienden la transparencia ni la libertad”, enfatizó en X.
La candidata presidencial del correísmo, Luisa González, del Movimiento Revolución Ciudadana, sostuvo que esta es una “medida desesperada” solicitada por Noboa al CNE en días pasados.
“No permitiremos que nos roben la democracia, la esperanza vencerá (…) Nos quieren quitar la libertad de usar un celular”, dijo en un mensaje publicado en su cuenta de X.
Tras la primera vuelta electoral del 9 de febrero, en la que Noboa y González resultaron finalistas con una apretada diferencia, el presidente atribuyó el buen desempeño de la candidata opositora en las urnas a supuestas amenazas a votantes por parte de delincuentes.
“En ciertas provincias los votantes recibían amenazas de grupos armados para que voten por la candidata que los representa”, dijo entonces Noboa.
La aspirante del correísmo rechazó en su momento la afirmación de Noboa y sostuvo que en las provincias donde obtuvo mayor votación fue por el impacto de la violencia. Días después, Noboa pidió públicamente al CNE que prohibieran el uso de celulares al momento de votar.
Este lunes, el CNE realizará el sorteo de intervenciones de los dos candidatos para el segundo debate presidencial ―obligatorio― que se desarrollará el domingo 23 de marzo a las 8 p.m. (7 p.m., hora de Miami) en las instalaciones del canal estatal Ecuador TV.
Tras determinar que no había recursos pendientes que tramitar, el CNE proclamó oficialmente este miércoles los resultados definitivos de la primera vuelta electoral. Noboa obtuvo 4 millones 527.606 votos (44,17%) y González 4 millones 510.860 votos (44%). Es decir, hubo una diferencia de 16.746 votos entre los dos aspirantes al sillón de Carondelet.
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