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Algunos residentes de California recibieron protección extra contra los incendios (por un precio)

Por Samantha Delouya y Stephanie Becker, CNN

Cuando el incendio de Palisades comenzó a intensificarse el martes por la noche, el ejecutivo inmobiliario de Los Ángeles Keith Wasserman publicó un pedido a través de las redes sociales: “¿Alguien tiene acceso a bomberos privados para proteger nuestra casa en Pacific Palisades? Tenemos que actuar rápido. Todas las casas de los vecinos están en llamas. Pagaré cualquier precio”.

La publicación, ahora eliminada, provocó una intensa reacción de los usuarios de las redes sociales, que consideraban que los ricos no deberían recibir una atención especial durante una emergencia.

“Quién salve su casa no debería depender de su cuenta bancaria”, comentó un usuario de TikTok.

Mientras que los múltiples incendios forestales, impulsados por fuertes vientos, han destruido miles de casas en la zona de Los Ángeles, algunos residentes han hecho todo lo posible —a menudo con mucho dinero— para tratar de proteger sus hogares de la destrucción. Algunos han pagado miles de dólares por rociar sus propiedades con geles ignífugos para frenar los daños, mientras que otros han invertido en hidrantes personales para ayudar a combatir los incendios cerca de sus propiedades.

A pesar de la intensa reacción a la publicación de Wasserman en las redes sociales, la mayoría de los bomberos privados no son contratados por personas adineradas, explicó a CNN Mike Stutts, bombero de Somerset, California. En su lugar, la mayoría trabajan con compañías de seguros de hogar que intentan salvar casas caras para evitar los costosos pagos del seguro.

Según el material publicado en su sitio web, la compañía de seguros Chubb ofrece “Servicios de defensa contra incendios forestales” a los clientes que cumplan determinados requisitos. Durante un incendio forestal, esos servicios incluyen “enviar bomberos profesionales certificados a su casa”, “retirar materiales combustibles de alrededor de su casa” y “rociar su casa con un gel que absorbe el calor y bloquea el fuego”.

Tim Bauer, vicepresidente senior del servicio de restauración de daños por incendio Allied Disaster Defense, dijo que después de los tres primeros días de incendio en Pacific Palisades, tenía una lista de espera de al menos 200 personas, todas desesperadas por los servicios de la empresa. Bauer dijo que la empresa está rociando las propiedades con el mismo retardante de fuego lanzado por los aviones cisterna de extinción de incendios.

Allied rocía los arbustos y demás vegetación para evitar que las cenizas y chispas prendan fuego a la vivienda.

En épocas que no son de emergencia, el costo del servicio es de unos US$ 1.000, pero en condiciones peligrosas de incendio forestal, Bauer cobra US$ 5.000.

Para muchos vecinos del acomodado barrio de Pacific Palisades, se trata de un precio pequeño a cambio de la protección de viviendas multimillonarias. Bauer dijo que una mujer ofreció US$ 100.000 para que la trasladaran al primer puesto de su lista de espera, pero Bauer dijo que pensaba mantener el orden original de su lista.

El viernes, Michael Owens, promotor inmobiliario de la zona de Los Ángeles, mostró una de sus casas recién construidas a una familia cuya vivienda acababa de ser arrasada por el incendio Palisades.

El precio de venta de la casa en Westlake Village, en la frontera entre los condados de Los Ángeles y Ventura, es de casi US$ 15 millones. Uno de sus principales atractivos es que está construida con materiales ignífugos y cuenta con un hidrante personal.

En total, el precio de un hidrante para una vivienda es de unos US$ 100.000, dijo Owens a CNN. Eso incluye el costo de la instalación y una cuota única de US$ 35.000 a la compañía municipal de agua para el acceso. Owens dijo que tiene uno en frente de su propia casa Westlake Village, también.

Owens dijo que esperaba que los recientes incendios forestales convencieran a más gente para dar prioridad a la inversión en hogares a prueba de incendios.

“Será interesante ver ahora, cuando se construyan casas en Palisades, lo que la gente se plantea hacer cuando están en una zona urbana de alto riesgo de incendio”, dijo.

En Malibú, un tipo de hidrantes personales que cuesta bastante menos de US$ 100.000 ha crecido en popularidad, dijo Kevin Rosenbloom, un residente local que posee una empresa de dispositivos sanitarios.

La casa de Rosenbloom fue reconstruida tras quedar devastada por un incendio forestal en 2007. Delante de su casa construyó un “hidrante Hainy”, creado por Matt Haines, también residente en Malibú, para ayudar a la zona a combatir los incendios forestales.

Según Rosenbloom, el hidrante le costó unos US$ 2.500 y, como se conecta al suministro de agua personal de la casa, puede instalarlo un plomero. Rosenbloom dijo que su casa no ha sido afectada por los recientes incendios, pero que planea utilizar su hidratante personal para mantener su casa “fresca y húmeda” si se aproxima uno.

“La gente de todo Malibú ha estado poniendo estos hidrantes. Es un primer paso básico y muy barato en comparación con otros sistemas disponibles”, afirma Rosenbloom. “Se trata realmente de la próxima tecnología en extinción y protección contra incendios”.

Sin embargo, incluso con una inversión extra en sistemas de extinción y supresión, no hay garantía de que una vivienda pueda sobrevivir a un incendio tan fuerte como el que sigue arrasando Pacific Palisades.

Wasserman, que envió la petición de bomberos privados, no respondió a la solicitud de comentarios de CNN.

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